Creando Entidades Mágickas (continuación 6/15)
David Michael Cunningham
con
Taylor Ellwood y Amanda R. Wagener
(Traducido por Manon)
Contenido:
- Definición de Entidad
- Usos de la Entidad
- Precauciones Importantes
- Metas y Resultados
- Planificando tu Entidad
- Eligiendo un Nombre <——
- La Apariencia de tu Entidad
- Alojando a tu Entidad
- Tiempo de Alimentación
- Habilidades Mágickas
- Intervalo de Vida
- Programando tu Intención
- Dándole Vida a tu Entidad
- Contactando con tu Entidad
- Adaptaciones de la Entidad
6. ELIGIENDO UN NOMBRE
Dar nombre a una entidad puede ser una de las cosas más difíciles a hacer para algunos magos. Algunos, innecesariamente agonizan con qué tipo de nombre haría justicia a su creación. Otros se asustan de no ser bastante creativos para dar con un nombre original. Otros temen que el nombre que elijan entrará en conflicto con otras entidades preexistentes.
Para la mayoría, sin embargo, nombrar a una entidad es justo tan fácil como respirar. No hay realmente ninguna razón de por qué deberías ser diferente al respecto. Hay muchas fórmulas y métodos diferentes que puedes emplear, para ayudarte a sacar a la luz un nombre que sea conveniente para tu entidad.
Una de las más fáciles formas de nombrar una entidad es derivar su nombre de la declaración de intención. Esto se hace tomando en primer lugar la declaración de intención, “To influence and attract fine art purchasers that are able to and that will purchase my sculpture for price that I set (Influir y atraer compradores de bellas artes que son capaces y comprarán mi escultura por el precio que le he puesto)”, por ejemplo, y quitando todas las palabras innecesarias como “y”, “de”, “que”, etc. Idealmente deberías dejar alrededor de tres a nueve palabras, por ejemplo “influence attract fine art purchasers able will purchase my sculpture price I set”. Como puedes ver por el ejemplo, la ley de “dejar de tres a nueve palabras” no será válida en todo caso.
Lo siguiente que harás es tomar la primera letra de las palabras restantes, y combinar esas letras para formar el nombre de la entidad. Así en nuestro ejemplo, tendríamos “iafarawpmspis.” Como puedes ver, este nombre es muy ininteligible y no fácilmente pronunciable. En este caso reduciremos más el nombre eliminando todas las letras repetidas. Cuando hagamos esto, surgirá “iafrwpms.”
El resultado es un poco más manejable, pero faltan algunas vocales, es todavía difícil trabajar con él. En tales casos, querremos añadir las vocales que nos permitirán crear un nombre que sea pronunciable. Elegir las letras extras puede hacerse de muchas formas diferentes. Una de las más fáciles es escoger y elegir las letras que piensas que complementarán mejor el nombre. Otra forma es elegir las letras que tienen simbolismo numérico que llevarán al nombre a un número, vía numerología, que resuene con la tarea de la entidad. Para nuestro ejemplo, tomaremos la ruta numerológica, la cual nos da “firiwaspim” con una numerología equivalente al número 6 (magnético, sociable, artístico, etc.) usando el sistema Pitagórico de numerología. Ahora éste es un poco más fácil de leer y decir, pero iremos un poco más allá dividiéndolo en dos. Haciendo que resulte “Firi Waspim.”
Algunas veces puede que quieras nombrar a la entidad después de su función, como “buy new car (comprar coche nuevo)”. Puede que quieras deletrearlo hacia atrás como “rac wen yub,” y combinarlos para formar el nombre de “Racwenyub.” Los nombres pueden ser largos, o impronunciables en la forma larga. Si este es el caso, será correcto partir el nombre como “Racwen Yub,” o “Rac Yubwen.” La razón para deletrear las palabras hacia atrás es liberar tu mente del significado del nombre y también le da el sentimiento de los “anticuados” nombres de los espíritus de la antigüedad, a menudo encontrados en los libros de hechizos y semejantes - esto no es necesario, es meramente un punto de gusto persona. Algunos magos consideran que el trabajo con entidades de “extraños” nombres, parece ayudarles a centrarse en el trabajo mágicko entre manos, mientras que otros sienten que eso les obstaculiza. Usa lo que se sienta y funcione mejor para ti. Sea el tipo que sea el que utilices como convención para nombrar, es una buena idea probar, si es posible, a incorporar de alguna manera la tarea de la entidad dentro del nombre. Esto servirá para favorecer la conexión de la entidad con la tarea deseada y creará poder en el uso de la entidad.
Una cosa que debería ser mencionada aquí, es que deberías ser cauteloso con cualquier sentimiento negativo que te provoque un nombre, si construiste el nombre de cero o simplemente elegiste las palabras descriptivas. Si el nombre te da una sensación negativa, o tiene palabras descriptivas negativas, puede impedir tus trabajos mágickos. Lo cual no implica que si estás construyendo una entidad para maldecir a alguien o algo, que no debería sonar negativo en general, sino que más bien que el nombre no te debería sonar negativo a ti, que eres el que está trabajando con él. Si te suena negativo a ti, en otras palabras, que no te gusta el nombre o que te deja un mal sentimiento cuando lo está diciendo o trabajando con él, entonces no deberías usarlo. Pues si lo haces, puede que empiece a resentirse tu entidad, y tu trabajo mágicko pueda no manifestarse en la manera que habías esperado. Siempre intenta nombrar a tu entidad con un nombre que te guste y que te suene bien cuando trabajes con él.
Por supuesto, no tienes que dar nombre a tu entidad obligatoriamente. A algunas entidades muy exitosas nunca se les ha dado nombre. Darles nombre sin embargo, les aporta personalidad. Puesto que nosotros, como humanos, tendemos a tener más facilidad para relacionarnos con las cosas que tienen nombre.
Los nombres nos permiten también tener control sobre lo que es nombrado. En algunas tradiciones mágickas, los nombres son simbólicos de la cosa que es nombrada. Por esto, al dar nombre a una cosa - o entidad en este caso - puedes guiarla para hacer tus deseos. Es una cosa importante mantenerlo en mente cuando estás creando tu entidad - después de todo, estás creándola para servirte y a tus deseos.