miércoles, julio 3, 2024
Oraciones

Oración del cabrito negro y la gritona

Se hace para desesperar y atraer. Con un tabaco durante 7 días para más efectividad puedes clavarle 7 alfileres en nombre de la persona a desesperar, en diferentes áreas del tabaco desde la boquilla hasta el centro.

 

Ofrezco los humos de este tabaco
a los 7 espíritus infernales,
por el espíritu de la gritona,
por el espíritu del cabrito negro,
por el espíritu vivo, alma, y materia de:
(nombre de la persona)
para que la desesperes
y no le dejes tener tranquilidad,
ni sosiego y piense solo en mí,
que me llamo (tu nombre).

Te busco como la gritona buscaba su hijo,
y como el cabrito negro te busca a ti
(nombre de la persona)

Desde hoy por todas partes,
te encontrará y te traerá hasta mi
desesperada y humillada de amor a mis pies.

Yo te conjuro
(nombre de la persona)
parte por parte,
nervio por nervio
coyuntura por coyuntura,
hasta llegar a tu miembro,
para que tu naturaleza no se pueda desarrollar
con ningún otro hombre o mujer,
solo en mí o en mi pensamiento
encuentres sosiego
y vengas desesperada a buscarme.

Yo te conjuro:
(nombre de la persona)
de la cabeza a los pies,
por la hora de tu nacimiento.

Yo te conjuro por los 9 meses
que estuviste en el vientre de tu madre
(nombre de la madre).

Yo te conjuro de la cabeza a los pies
por la hora de tu comunión.

Tabaco que en humos te conviertes,
por la virtud que tienes,
y la que yo te confiero
para que te penetres en el alma y cuerpo de:
(nombre de la persona),
para que si durmiendo está, me sueñe,
que si caminando va,
en mi vea su sombra,
que si pensando esta,
a mí me añore,
que en su cara me vea y me nombre.

El humo ofrezco al ángel de la guarda de:
(nombre de la persona)
para que
(nombre de la persona)
oiga mi voz donde quiera que esté.
Si tiene cabeza me piense,
si tiene ojos me mire,
si tiene nariz me huela,
si tiene boca me hable,
si tiene oídos me oiga,
si tiene corazón me quiera,
si tiene manos me toque,
si tiene pies me busque,
que no tenga gusto ni placer,
sino hasta que a mi lado este,
que no pueda ni con hombre ni mujer hablar,
ni en cama dormir,
ni en mesa comer,
sino pensando en mí que me llamo
(tu nombre).

Ven  (nombre de la persona)
que yo (tu nombre) te llamo
Que así sea y así es.

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